lunes, 14 de diciembre de 2009

Leche frita

Quiero dar comienzo a este blog culinario con una de las recetas que más satisfacciones (y kilos) me han proporcionado. Es un postres sencillo, aunque si se observa bien la fuente cuando se sirve, se pueden ver las calorías revoloteando por encima. Espectacular. De todas maneras, de cara a estas fiestas de descontrol gastronómico, en las que todo vale, pues quedaréis como reyes (magos) ante vuestros invitados. Ahí va.

Ingredientes

  • 150 gramos de azúcar.
  • 3 yemas de huevo.
  • 150 gramos de harina
  • 1 litro de leche.
  • Canela en rama.
  • Canela en polvo.
  • Ralladura de limón.
Elaboraçao

Batimos las yemas con el azúcar y la harina, al tiempo que se vierte la leche templada. Recién batidas se ponen a cocer hasta que hiervan, momento en el que se añade la ralladura de limón sin dejar de remover en ningún momento (momento crítico en el que no estaría mal la ayuda de algún propio para no hacer el canelo echando la ralladura y meneando el tema al mismo tiempo).
Vertemos la mezcla obtenida (que ya deja entrever la sabrossura del resultado final) en una fuente plana y amplia, y se deja enfriar hasta que cuaje totalmente, quedará una textura como la de la masa de las croquetas.
Ponemos en el fuego una sartén grande (para que haya conflictos entre las porciones de leche frita), y cuando esté muy caliente vamos cogiendo porciones de la masa de leche frita (yo uso una cuchara normal de sopa), las pasamos por huevo batido y las vamos friendo.
Conforme vamos sacando los trozos de leche frita los ponemos a escurrir en papel absorbente. Se sirven fríos, espolvoreados previamente con canela en polvo y azúcar. Señores y señoras, este postre es, sencillamente... ¡la leche!

Truco del almendruco:

Para evitar que la leche se desborde en el cazo, además de estar al loro y no despistarnos por ahí, que hay que estar por lo que se está, leche, estaría bien remojar el cazo antes de echar la leche con un poco de agua.

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